El manejo del SXF se basa en un enfoque multidisciplinario. Los pacientes se benefician de terapias especializadas como terapia del habla y del lenguaje, terapia ocupacional, terapia física, e intervenciones o terapias conductuales. Algunos pacientes necesitan manejo farmacológico para manejar trastornos del sueño, trastornos del comportamiento, comportamientos agresivos, ansiedad, entre otros. Es importante resaltar que el manejo con medicamentos debe ser en conjunto con las terapias especializadas. Algunos pacientes con SXF pueden presentar otros problemas médicos como por ejemplo convulsiones para los cuales necesitan otros medicamentos. Es importante que el médico tratante de un manejo integral y en caso de necesitarlo, remita al paciente a un subespecialista como un Neurólogo o un Psiquiatra.
Los individuos con SXF pueden beneficiarse del apoyo educativo individualizado en entornos escolares inclusivos. Esto puede implicar adaptaciones curriculares, estrategias de enseñanza especializadas, programas de intervención temprana y servicios de apoyo, como asistentes educativos o tutores.
El diagnóstico de SXF puede tener un impacto significativo en la familia y en la persona afectada. Es fundamental contar con un sólido sistema de apoyo psicológico y emocional para enfrentar los desafíos asociados con el SXF. Esto puede incluir terapia de apoyo individual o familiar, grupos de apoyo y acceso a recursos comunitarios.
Es importante recordar que el tratamiento y el manejo del SXF deben ser individualizados y adaptados a las necesidades específicas de cada persona. Trabajar en estrecha colaboración con un equipo multidisciplinario de profesionales de la salud, incluyendo médicos, terapeutas, educadores y especialistas en genética, puede ayudar a desarrollar un plan de tratamiento integral y brindar el mejor cuidado posible para las personas con SXF.
Es importante tener en cuenta que actualmente no existe una cura para el SXF. Sin embargo, hay varias opciones de tratamiento y estrategias de manejo que pueden ayudar a mejorar la calidad de vida de las personas afectadas. Adicionalmente, hay varios estudios evaluando opciones de tratamiento para mejorar diferentes áreas afectadas en el SXF como el lenguaje y la cognición.